Examples of using "Quotidien" in a sentence and their spanish translations:
Todos los días estamos aprendiendo,
Es un diario.
El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.
- Él se pone un corbatín todos los días.
- Él lleva pajarita todos los días.
la vida era muy difícil, una lucha diaria.
a casi toda la física en nuestro mundo cotidiano.
jugando con juguetes en el mundo cotidiano.
Él jamás desatiende leer todos los días el diario.
El virtuosismo exige años de práctica cotidiana desde la niñez.
Algo así es cosa de todos los días.
en un boletín de noticias o una correo electrónico diario o semanal
ya sea el estrés de las emergencias o solo diario, o del día o día.
y si hay algo que no deja de impresionarme
¿Comprendemos lo que ocurre en la vida diaria de un artista,
También se trata de cómo somos influidos a diario.
mientras que los anfitriones cotidianos se centran en hacer bien las cosas
- El verdadero arte de vivir consiste en ver lo extraordinario en lo cotidiano.
- El verdadero arte de vivir consiste en ver lo maravilloso en la vida cotidiana.
- Danos hoy nuestro pan de cada día.
- El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.
La mayoría de los japoneses se toman un baño cada día.
- La mayoría de la gente escribe sobre su vida cotidiana.
- La mayoría de la gente escribe sobre su vida diaria.
No hay día que él no lea los periódicos.
Encontré el diario que mi padre mantuvo por 30 años.
No existe tal cosa, en esta etapa de la historia del mundo en los Estados Unidos, algo como prensa independiente. Ustedes lo saben y yo lo sé. No hay uno solo de ustedes que se atreva a escribir sus opiniones honestas y si lo hicieran sabemos de antemano que nunca saldría en la prensa. A mí me pagan cada semana para mantener mis opiniones honestas fuera del periódico con el que tengo relación. A otros de ustedes les pagan salarios similares por cosas similares y cualquiera de ustedes que quisiera ser tan tonto como para escribir opiniones honestas andaría por las calles buscando otro empleo. Si se permitiera que mis opiniones honestas aparecieran en una edición de mis periódicos, antes de veinticuatro horas, mi ocupación ya habría desaparecido. El negocio de los periodistas es destruir la verdad, mentir abiertamente, pervertir, satanizar, haciendo reverencias a los pies de los ricos, y vender a su país y a su raza por su pan de cada día. Ustedes lo saben y yo lo sé, y ¿qué locura es esta de brindar por una prensa independiente? Somos payasos saltarines, ellos mueven los hilos y nosotros bailamos. Nuestros talentos, nuestras posibilidades y nuestras vidas son todas la propiedad de otros hombres. Somos prostitutas intelectuales.