Examples of using "Passò" in a sentence and their spanish translations:
Dick me pasó la foto.
la investigación tuvo un giro de muerte accidental a homicidio.
El barco pasó bajo el puente.
Ha pasado un día más.
- Ella le dio la llave.
- Ella le alcanzó la llave.
Susana pasó las vacaciones de verano en casa de su abuela.
Adam pasó 3 años en prisión por posesión de drogas.
Dick me pasó la foto.
Pasó más de una hora antes de que el tren comenzara a moverse.
Me curé del catarro rápidamente.
Él pasó sin siquiera mirarme.
Friedland, con el mando del Primer Cuerpo pasando al General Victor.
- El tiempo ha pasado rapidísimo.
- El tiempo pasó muy deprisa.
Tom pasó tiempo con Mary.
Tom le pasó el menú a María.
Tom le pasó la pelota a Mary.
Ha pasado un día más.
Tom le pasó a Mary las tijeras.
El barco pasó bajo el puente.
Tom le pasó un libro a Mary.
Tom pasó el contrato a Mary.
La costurera enhebró hilo rojo en la aguja y empezó a coser.
Tom le pasó a María una bebida energética.
mando activo y un rápido ascenso: en solo dos años ascendió de capitán a general,
John aprobó el examen.
En varias horas de intensos combates, el reducto cambió de manos más de una vez.
El barco atravesó el Canal de Panamá.
La vieja gitana movía su mano sobre la bola de cristal y, ojeando dentro, contempló mi futuro.
De repente se me pasó por la cabeza la idea de sorprenderla.
Adam pasó 3 años en prisión por posesión de drogas.
Tom superó la prueba física.
Tom estuvo tres años en la cárcel.
Ella se pasó toda la tarde cocinando.
- Pasó la tarde leyendo un libro.
- Él pasó la tarde leyendo un libro.
Ella pasó algún tiempo en Boston.
Tom pasó la Navidad en Boston con Mary.
Él pasó la luna de miel en las Maldivas.
Cierto hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores, que lo desnudaron y lo golpearon y se marcharon dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajó por aquel camino. Cuando lo vio, se cruzó al otro lado. Del mismo modo, también vino un levita, y cuando llego al lugar, y lo vio, se pasó también al otro lado. Luego, un samaritano que viajaba, llegó al lugar donde él estaba. Cuando lo vio, sé compadeció del hombre, se acercó a él, vendó sus heridas, echando aceite y el vino sobre ellas. Luego, lo puso sobre su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo tomó a su cuidado.