Examples of using "Bosque" in a sentence and their spanish translations:
Se perdió en el bosque.
Allí encontramos dos cabañas.
En el bosque reinaba el silencio.
Niñas pequeñas están bailando en el bosque.
Tom se perdió en el bosque.
El perro desapareció en el bosque.
Los animales viven en el bosque.
Los pájaros cantaban en el bosque.
Estaba dando vueltas por el bosque.
Me gusta pasear por el bosque.
Él fue a cazar en el bosque.
- Es divertido ir a caminar en el bosque.
- Es divertido caminar por el bosque.
Hay muchos senderos ocultos en este bosque.
El príncipe estaba perdido en el bosque.
El bosque está lleno de árboles.
El bosque llega hasta el mar.
Los ladrones se escondieron en el bosque.
Ellos intentaron juntar madera en el bosque.
Cuidado con el fuego en el bosque.
viajamos durante horas y llegamos a un lugar en medio del campo
Hay un sendero que atraviesa el bosque.
Él encontró un perro abandonado en el bosque.
- Él se perdió mientras andaba en el bosque.
- Caminando por el bosque, se perdió.
Se pueden ver muchos animales en este bosque.
A Tom le gusta dar paseos por el bosque.
Vivió una vida solitaria en el bosque.
¿Por qué te perdiste en el bosque?
Solo en un bosque frondoso encontrarás a ese insecto.
Un viento fresco sopla en el bosque de castaños.
Después de la lluvia crecen muchas setas en el bosque.
El cuerpo del tipo desaparecido estaba oculto en el bosque.
Si el tiempo lo permite, irán al bosque a recoger setas.
Es la primera vez que estaciono mi auto en el bosque.
Atravesamos el bosque valerosamente, sin temer a los fantasmas, lobos o chacales.
En el bosque hay muchas luciérnagas que se encienden y se apagan.
El camino que debes seguir se encuentra a la vuelta de un bosque pantanoso, a la orilla de un río.
Oscuros en la noche solitaria cruzaban entre sombras la vacía mansión de Dite, sus desiertos reinos, como senda de bosque en la que esparce amortiguada luz la luna incierta en el cielo invadido de penumbra, cuando la noche el mundo descolora.
En un lugar soleado había una vieja y agradable casa de campo cerca de un río profundo, y desde la casa hasta el lado del agua crecían grandes hojas de bardana, tan altas que, debajo de las más altas, un niño podía estar de pie. El lugar era tan salvaje como el centro de un espeso bosque. En este cómodo refugio se sentaba una pata en su nido, esperando que sus polluelos eclosionasen; la pata estaba empezando a cansarse de su tarea, ya que los pequeños estaban tomando mucho tiempo para salir de sus cascarones, y ella rara vez tenía visitantes.