Examples of using "Toe" in a sentence and their spanish translations:
centro enemigo.
Añade carne.
¡Añade frases!
Quizá algunas veces.
- Agrega un poco de leche.
- Añada un poco de leche.
- Y finalmente se rindió.
- Él finalmente cedió.
- Al fin cedió.
El desempleo está aumentando.
Quien calla otorga.
Cierra el libro.
Pero aplicas jabón...
Con permiso.
La criminalidad aumenta.
No añadas anotaciones.
Añade más agua.
Añadí agua.
Deja la puerta cerrada.
- A lo mejor necesitas vacaciones.
- A lo mejor necesitáis vacaciones.
Napoleón decidió atacar.
- Nada importa realmente.
- Nada verdaderamente importa.
Tráemelo.
Todo el mundo está mirando.
Eso no importa.
De vez en cuando juego al golf.
- Cierra la puerta, por favor.
- Por favor, cierra la puerta.
Añada una cucharadita de pimiento.
Necesito unas vacaciones.
Llámame de vez en cuando.
¡Ándele!
Yo juego al tenis de vez en cuando.
Tom admitió su error.
¡Lánzamelo!
Ella miró con asombro.
Mándemelos.
Sí, no me está yendo muy bien.
Todo bien por ahora.
China se unió a la Organización Mundial del Comercio.
Las familias pequeñas se acercan más.
El rival también le agrega una floritura a su llamada.
Bueno, está resistiendo.
Así que fui a ver a papá.
al famoso vikingo.
solo aumenta aproximadamente la mitad de eso
- Antiguamente, Islandia pertenecía a Dinamarca.
- Islandia solía pertenecer a Dinamarca.
Él se vio obligado a hacerlo en contra de su voluntad.
Pocos políticos admiten sus errores.
De vez en cuando estudio esperanto.
¿Adónde van ahora?
No tengo nada que agregar.
Él le deseó a ella unas felices vacaciones.
- Le veo de vez en cuando
- Te veo de vez en cuando.
Permítame excusarme.
Él vino a verme ayer por la tarde.
Añada tres cucharadas de vino blanco.
- Tírame la pelota.
- Tírame el balón.
- Tírame la bola.
Vamos, admítelo.
Ella cedió en su proposición.
Permíteme repararlo.
- Mi tío viene a verme de vez en cuando.
- Mi tío me visita de vez en cuando.
- Lo reconozco, me equivoqué.
- Admito que me equivoqué.
¿Me permitís hacer una observación?
Puedo confiarle mi vida.
Agrega un gorjeo al final de su llamada.
Hasta ahora hemos conocido a Marshals Pérignon…
Lo reconozco, me equivoqué.
Ese tipo de accidentes ocurren de vez en cuando.
Él admitió que era verdad.
Permíteme contradecirte.